Filosofía de la Educación |
Una visión y una voz."
Como educador, además de Artista, mi objetivo es reconocer la soberanía de cada individuo: establecer y desafiar nuestros límites, conectarnos con la naturaleza y alentarnos en la búsqueda de nuestra Verdad Personal.
Cada persona, sin importar la edad, es un hermoso equilibrio de existencia. Cada persona, sin importar su apariencia, está en posesión de una vida valiosa.
Desde muy joven, aprendí a apreciar la diversidad y la interdependencia de la vida a través del arte. Es un honor y una alegría para mí compartir este conocimiento contigo; para fomentar en cada alumno una comprensión más profunda de cómo nos conectamos y por qué.
Porque nuestras diferencias no deben temerse ni evitarse; podemos aprender a celebrar nuestra individualidad y apreciar el mundo que nos rodea de muchas maneras. Tenemos más en común de lo que pensamos.
A veces, todo lo que se necesita para despertar, inspirar o evolucionar es que un individuo sea escuchado. Me esfuerzo por permitir que todos en mis clases sean escuchados; capacitar a otros para que escuchen y hablen con propósito. Además, trabajo para ayudar a mis alumnos a canalizar sus observaciones hacia el arte.
Se ha demostrado que los esfuerzos creativos estimulan y refuerzan el aprendizaje. Siento que puedo dar fe de ello y, con mi formación y experiencia, puedo conectarme con una gran variedad de comunidades.
Con propósito, práctica y pasión, la vida puede convertirse en arte.
- Valerie Hildreth (2021)
Cada persona, sin importar la edad, es un hermoso equilibrio de existencia. Cada persona, sin importar su apariencia, está en posesión de una vida valiosa.
Desde muy joven, aprendí a apreciar la diversidad y la interdependencia de la vida a través del arte. Es un honor y una alegría para mí compartir este conocimiento contigo; para fomentar en cada alumno una comprensión más profunda de cómo nos conectamos y por qué.
Porque nuestras diferencias no deben temerse ni evitarse; podemos aprender a celebrar nuestra individualidad y apreciar el mundo que nos rodea de muchas maneras. Tenemos más en común de lo que pensamos.
A veces, todo lo que se necesita para despertar, inspirar o evolucionar es que un individuo sea escuchado. Me esfuerzo por permitir que todos en mis clases sean escuchados; capacitar a otros para que escuchen y hablen con propósito. Además, trabajo para ayudar a mis alumnos a canalizar sus observaciones hacia el arte.
Se ha demostrado que los esfuerzos creativos estimulan y refuerzan el aprendizaje. Siento que puedo dar fe de ello y, con mi formación y experiencia, puedo conectarme con una gran variedad de comunidades.
Con propósito, práctica y pasión, la vida puede convertirse en arte.
- Valerie Hildreth (2021)
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